Portugal. The Man son capaces de crear dulces melodías y ritmos abrasivos, una lucha de pulsiones absolutamente aprobados porque son parte de su ADN, algo aceptado e intrínseco en sus componentes principales: la asociación formada por John Gourley y su mujer Zoe Manvil. Ellos llevan una vida infranqueable acechando el indie-pop. Aquí encontramos piezas sin complejos como el de indie-pop como de "Denali” o la vibrante “Pittman Ralliers”, una variedad de sonidos que enriquecen el producto. Su décimo disco resulta arriesgado y osado a partes iguales, porque ofrecen una curiosa variedad de sonidos que a veces resultan atractivos y en otras ocasiones muchas veces escuchados. Sin lugar a dudas se trata de un trabajo lleno de contrastes que hay que resolver. Un singular caleidoscopio con muchas aristas.
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