La música italiana llora hoy la muerte de Franco Battiato, fallecido a los 76 años en su villa de Milo (Sicilia). El famoso cantautor estaba enfermo desde hace algún tiempo, tras una fractura de fémur y pelvis, además llevaba años padeciendo alzeheimer. Había reaparecido en las redes sociales, pero dejó de hacerlo completamente en público. El último concierto celebrado por el artista se remonta al 17 de septiembre de 2017, en el Teatro Romano de Catania y posteriormente tuvo que ser suspendida su gira por motivos de salud. Poco antes del retiro oficial, en agosto de 2019, se lanzó su último álbum, "Volveremos de nuevo". Es difícil encasillar a Battiato, un tipo inclasificable. Su música oscilaba entre un gran número de géneros, desde el pop a la música culta, del rock progresivo a fases vanguardistas, la música étnica, la ópera, e incluso experimentó con la electrónica. En su larga carrera deja canciones inolvidables como "La cura", "Centro de gravedad permanente" o "Yo quiero verte danzar". Franco Battiato en España tiene una merecida reputación con varios álbumes publicados como Battiato en español (1987), el doble Battiato collection: 29 temas en español (1996) y la recopilación "La estación de los amores" (2005).
La noticia de la muerte, sobre las 5 horas locales, la ha facilitado su propia familia, indicando que el funeral se realizará de forma estrictamente privada, al tiempo que agradecía a todos los innumerables testimonios de cariño recibidos. «Un Maestro nos ha dejado. Uno de los más grandes de la canción de autor italiana. Único, inimitable siempre en busca de nuevas expresiones artísticas. Deja un legado eterno», ha indicado el ministro de Cultura, Dario Franceschini, nada más conocerse la triste noticia. Franco Battiato es una leyenda de la música en Italia. Su carrera, de más de cincuenta años en el mundo de la música, lo convirtió en un personaje realmente único en el panorama italiano, que hoy se encuentra de luto por su desaparición. Transgredió y jugó con tantos estilos de música a lo largo de su vida que por méritos propios se ha convertido en uno de los músicos más importantes de Europa, y, de hecho, es un símbolo de la cultura europea moderna. Su música es una filigrana y como se ha dicho en alguna ocasión: "es física y metafísica". Fue un humanista, un hombre que evitaba las multitudes, que nunca se prodigó en sociedad, que se explicó a medias; devoto de las raíces de la cultura italiana. Medio monje y medio cantante, tenía entre sus lecturas predilectas a San Juan de la Cruz y a Santa Teresa.
Fue en 1981 cuando el músico llegó al gran público, primero logró ganar el festival de San Remo de aquel año como autor, habiendo compuesto con Giusto Pio y la pieza "Per Elisa", después con "La voce del padrone", su primer disco de larga duración de esta etapa, que se convirtió en un éxito sin precedentes en Italia: un millón de copias vendidas. De este album sacó versión española ese año (La voz de su amo). Tras "L'Arca di Noe" (1982) y "Orizzonti Perduti" (1983), grabó "Mondi lontanissimi" (1985) y "Echoes of sufi dande". En España "Ecos de danzas sufi" (1985), obtuvo un disco de oro. Battiato grabó varias de sus canciones en español y en nuestro país actuó en numerosas ocasiones. En 1987 editó sólo en España el LP titulado "Nómadas".
Se estrenó como director de cine y como guionista en 2002 con una obra basada en la isla de Sicilia, con los recuerdos de infancia y juventud. También ha dirigido varias películas, entre ellas Amor perdido y Musikanten, sobre Ludwig van Beethoven, presentadas en el Festival de Cine de Venecia. Gozó de gran fama y popularidad, en Italia y en el extranjero. Difícil, por tanto, catalogarlo, pero el cantautor siciliano fue etiquetado siempre como un artista genial que, además de su música atemporal y su cine, se dedicó también a la pintura. Siempre le recordaremos por poner tremendo empeño en todo lo que hacía, por su estilo poético y existencial, con el que daba personalidad a todas sus obras.
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