Hay que reconocerlo Mark Knopler en solitario es un músico lánguido, al que solo se puede acceder para un disfrute reposado. En
"Tracker" no vuelve a decepcionar. Once canciones componen su nuevo disco, álbum con el que fuera el alma de Dire Straits, muestra su cara más nostálgica. Eso sí, hay que reconocer que Mark Knopler canta cada vez mejor. Hay algún tema que destaca sobre el resto, como es el caso de
"Broken bones" o
"Beryl" que son claros homenajes a ese añorado monstruo de la composición que es J.J. Cale, así como el toque rockero de
"Hot Dogs".
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