Después de mirar hacia el pop más meloso en sus recientes discos, Tracey Thorn, mitad femenina de Everything But The Girl, recupera su vertiente más bailable en "Record", un disco intenso pero breve con colaboraciones de Shura, en uno de los mejores temas "Sister" y de Corinne Bailey Rae.
Tracey muestra una vez más un voz carismática en plena forma. Su nuevo material suena desenfadado, en un ejercicio que supera con buena nota.
"Record" es también un disco feminista, en sus letras habla de lo que significa ser madre, hermana, e hija. A lo largo del álbum, agradece varias veces ser las tres cosas. El álbum suena refrescante después de ocho años de retiro musical, al menos con su nombre, si no contamos varias bandas sonoras y discos de villancicos. Tracey apuesta por el pop electrónico desinhibido, con acierto. Solo hay una canción "Go" que resulta algo insulsa y se queda por debajo de la media.
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