La artista antes conocida como Antony Hegarty reaparece con "My back was a bridge for you to cross", un brillante álbum en el que habla de la intolerancia, los prejuicios, la insensibilidad social, la transfobia y el negacionismo. Su voz portentosa llega con mensajes claros que invitan a la acción. Anohni canta contra la incomprensión y la violencia de los intolerantes. Nada ha cambiado desde aquel extraordinario "I Am a Bird Now" (2005) en el que se presentaba como Antony & The Johnsons, un disco fundamental para el movimiento trans. Bien es cierto que en la portada del disco se presenta como ANOHNI and the Johnsons, con esa banda en la que intervienen músicos como el guitarrista y pianista Leo Abrahams, Chris Vatalaro o Sam Dixon que proporcionan esa fantástica sonoridad soul, en ocasiones con toques jazz, como se puede percibir desde el single "It Must Change", la canción más pegadiza, donde canta: "El modo en que me hablas, debe cambiar. Las cosas que me haces. El modo en que me dejas. Las semillas que me das, deben cambiar". Es un disco reivindicativo, pero también un trabajo exquisito como demuestran piezas como "Go Ahead", con esas experimentales guitarras en la que hay cierto derrotismo: "estás determinado a derribarme y no te pararé"; la espléndida "Rest" o "Sliver of Ice", que está inspirada en las últimas palabras que Lou Reed intercambió con la artista, cuando ya estaba muy enfermo.
Algunas canciones se vuelcan en esa defensa del medio ambiente y nuestro planeta, caso de "It’s My Fault" y "Why Am I Alive Now", que habla de la muerte de árboles y de una población que parece mirar hacia otro lado. "My Back Was a Bridge for You to Cross" es un trabajo sincero que se preocupa por hablarnos de cosas importantes para nuestro futuro. ANOHNI avisa y sería bueno que le hicieramos caso.
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