Tras ese desenfadado alias, que se puede traducir algo así como "mamá de fútbol" término que sirve para identificar a mujeres que emplean gran parte de su tiempo en llevar a sus hijos en edad escolar a sus actividades deportivas, nos encontramos a una joven de Nashville llamada Sophie Allison. Ella se puede convertir en una de las grandes promesas de este año, que acaba de empezar.. “Clean“, su tercer álbum, es un disco de apariencia frágil pero lleno de vitalidad, con temas tan acertados como la deliciosa "Last Girl", la guitarrera "Cool" o "Your Dog" donde nos cuenta lo fastidiado que es estar acorralada en una relación tóxica.
Las comparaciones con Courtney Barnett o Snail Mail no se han hecho esperar, aunque ella trabaja más el dreamy, la calidez, lo que remite a Damien Jurado o Jay Som. Soccer Mommy va camino de convertirse en un humilde estandarte dentro del ámbito del bedroom pop internacional. Sus dos primeros trabajos “For Young Hearts” (2016) y “Collection” (2017) eran obras interesantes, pero no tenían la pegada de este "Clean", en donde Sophie Allison demuestra sus solidez artística con apenas 20 años.Nacida en Suiza pero criada en una capital de la música como es Nashville, es allí donde a muy temprana edad recibió formación de guitarra en la Nashville School of the Arts cuando todavía era una niña. Comenzó a colgar sus canciones a internet durante el verano de 2015, cuando finalizaba sus estudios en la Universidad de Nueva York. Ese año realizaría su primer concierto como Soccer Mommy. Ahora con "Clean" la joven de Nashville está haciendo méritos para ser considerada una de las grandes revelaciones del indie rock de nueva era.
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