jueves, 19 de mayo de 2022

BIZNAGA “Bremen no existe”


Biznaga andan muy cabreados. La banda madrileña está cansada de un presente desalentador y un futuro lleno de desencanto, así que se muestran airados con ese punk furioso. "Bremen no existe" es el título de su nuevo disco, y Bremen es sinónimo de esa falta de perspectivas para una generación perdida. El relato que publicaron por primera vez los hermanos Grimm en el año 1819, sirve a Pablo Garnelo (guitarra), Jorge Martínez (batería), Jorge Navarro (bajo) y Álvaro García (voz y guitarra) para hablar de la falta de oportunidades. Aquel viejo cuento alemán narra la historia de cuatro animales domésticos que, tras toda una vida de servidumbre cruel a sus dueños, y ahora despreciados por el paso del tiempos, huyen de sus granjas con la esperanza de llegar a Bremen y dedicarse a tocar música en las calles. Durante su periplo, el grupo de animales, compuesto por un burro, un perro, un gato y un gallo, atracan a un grupo de ladrones y consiguen instalarse en su casa. Los animales nunca llegarán a Bremen pese a que era su destino. Es un futuro 'cancelado', como canta el grupo en "Líneas de sombra", la canción que abre el disco. "Somos el bicho que hay que erradicar", grita Biznaga en "Todas Las Pandemias de Mañana", y añaden descorazonados con las bajezas humanas: "Abrir un negocio en la miseria de los demás", lo que nos recuerda a al perfección lo acontecido por los comisionistas de las mascarillas en Madrid.
"Contra mi generación" (dedicada a "toda esa gente en edad de pirarse a un PAU / O de tirarse de un puente sin decir ni ciao", y también a "toda esa gente que duerme poco y mal / la precarizada y la aspiracional") y "Domingo especialmente triste" (que habla de una juventud empobrecida pero servida de internet y teléfono móvil, que vive"seis meses de curro y seis de subsidio") completan un póker de canciones ganador, en este disco de apenas 30 minutos que condensa muchos de los males de nuestro tiempo. Atención también a "Espíritu del 92" (cuyo estribillo clama: "¿el futuro era esto? no, por favor"), "Madrid nos pertenece" y "La escuela nocturna", temas que completan esa desgarradora visión de nuestro entorno.

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