Las Pussy Riot nunca defraudan, a pesar de las continuas amenazas y persecución que sufren por parte de Putin. Lanzan una nueva canción contra la guerra de Ucrania. "Mama Don’t Watch TV" (Мама, не смотри телевизор), se estrenó el día de Nochebuena, cuando se cumplían diez meses después de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Apareció junto a un comunicado en el que la banda rusa urgía a Occidente a dejar de comprar gas y petróleo a su país natal y piden que el presidente Vladímir Putin sea juzgado por un tribunal internacional.
Maria Alyokhina, Olga Borisova, Diana Burkot y Taso Pletner, las integrantes de Pussy Riot que aparecen en el vídeo, califican al Gobierno de Putin de “régimen terrorista”, y como “criminales de guerra”. Con imágenes de la invasión, de víctimas del conflicto pero también de opositores que han sufrido las consecuencias de enfrentarse al presidente (como el espía Aleksandr Litvinenko, envenenado), las integrantes del grupo denuncian las actuaciones del régimen de su país de origen. Para mostrar su crítica, una de las componentes de la banda acaba el videoclip meando sobre un retrato de Putin, se levanta el vestido y micciona de manera ostentosa sobre la cara del presidente ruso.
En su comunicado explican que desde el inicio del conflicto el 24 de febrero, la censura militar ha triunfado en Rusia, prohibiendo llamar a la guerra guerra y que se publique material sobre la invasión que no hayan sido revisados previamente por el Kremlin. “¡Al infierno, contaremos la verdad! Esta es la música de nuestra ira, indignación, y desacuerdo, un llanto desesperado y lleno de reproches contra las marionetas sedientas de sangre de Putin, lideradas por un monstruo caníbal”, escriben.
El estribillo de la canción se basa en la frase de un soldado ruso preso que le dijo a su madre: “Mamá, aquí no hay nazis, no veas la televisión”. Pussy Riot solicita el embargo de las ganancias de Rusia por la venta de gas y petróleo, prohibir la venta de armas y munición a ese país, embargar las cuentas bancarias y las propiedades en Occidente de funcionarios y oligarcas rusos e incrementar las sanciones contra ellos, y que un tribunal internacional juzgue a Putin y a sus acólitos, “a todo el que sea responsable del genocidio ucranio”.
El estribillo de la canción se basa en la frase de un soldado ruso preso que le dijo a su madre: “Mamá, aquí no hay nazis, no veas la televisión”. Pussy Riot solicita el embargo de las ganancias de Rusia por la venta de gas y petróleo, prohibir la venta de armas y munición a ese país, embargar las cuentas bancarias y las propiedades en Occidente de funcionarios y oligarcas rusos e incrementar las sanciones contra ellos, y que un tribunal internacional juzgue a Putin y a sus acólitos, “a todo el que sea responsable del genocidio ucranio”.
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